PUNTO DE ACUERDO PARA FORTALECER LA EQUIDAD DE GÉNERO.
Ricardo Monreal Ávila, integrante de la LXI Legislatura del Congreso de la Unión, con fundamento en lo dispuesto por el artículo 8, fracción II, del Reglamento del Senado de la República, presento ante esta Honorable Asamblea la siguiente proposición con punto de acuerdopara que el gobierno, en sus diferentes niveles, emprenda más y mejores acciones tendientes a fortalecer la equidad de género, al tenor de la siguiente
Estos datos resultan aleccionadores, porque si bien el 8 de marzo de declaró como Día Internacional de la Mujer, y este año conmemoramos más de 100 años de este protocolo, y no hay que dejar de lado el balance de la situación de la mujer en el país.
Basta decir que a nivel mundial las mujeres representan entre el 20 y el 50% de la fuerza laboral, pero solamente entre el 3 y el 20% son propietarias de la tierra, situación que se dramatiza aún más en los países en vía de desarrollo. En la política sólo en 24 países del mundo las mujeres conforman 30% o más de sus Congresos.[1] En este tenor de ideas la Organización de las Naciones Unidas, a través de la Plataforma de Acción Beijing, confirma que las mujeres no constituyen si siquiera la mitad en las estructuras de toma de decisiones.
En México, si bien desde el Congreso se ha venido impulsando un trabajo serio en cuanto a la igualdad de género, falta mucho por hacer. Pues “a pesar de contar con dos instrumentos jurídicos tan valiosos como la Ley General para la Igualdad entre Hombres y Mujeres y la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, observamos con preocupación la falta de cumplimiento de dicha normatividad; como ejemplo podemos citar que el análisis realizado a las 32 entidades federativas del país, refleja la nula o escasa participación de la mujer en cuanto al acceso a los cargos públicos de primer nivel en las diferentes dependencias gubernamentales estatales, tal es el caso de los gobiernos de Baja California, Coahuila, Durango, Guanajuato, Quintana Roo, Sonora y Tabasco, donde no hay una sola mujer al frente de puestos de decisión. Y en otros estados como Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Guerrero, Jalisco, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Veracruz y Yucatán hay tan solo una mujer ostentando este tipo de responsabilidades”.[2]
A su vez, cómo dejar de mencionar que en el plano laboral las diferencias entre hombres y mujeres continúan en la retribución económica; de acuerdo con la firma REGUS, las mujeres mexicanas reciben sueldos 35% inferiores a los de los hombres.[3]
A lo antes referido sumemos que 70% de la población considera que la sociedad mexicana es machista y 53% cree que las mujeres son discriminadas.[4]equidad de género y de discriminación a la mujer, aún hay más por hacer que por andar festejando.
Es necesario cambiar el rumbo. La participación de la mujer en la toma de decisiones es necesaria para consolidar un autentico régimen democrático, entendido éste no sólo como un mecanismo jurídico procedimental y electoral para organizar elecciones y acceder al poder, sino como forma de vida que redunde en una mejora constante del ciudadano en todos los ámbitos de la vida.
El gobierno, en sus diferentes niveles está obligado ética y políticamente a promover la equidad de género en la sociedad a través de más y mejores programas encaminados a ello.
Derivado de lo anterior, someto a consideración de esta Honorable Asamblea el siguiente
Dado en el salón Legislativo de Xicoténcatl, a los xx días del mes de marzo del 2011.
Ricardo Monreal Ávila, integrante de la LXI Legislatura del Congreso de la Unión, con fundamento en lo dispuesto por el artículo 8, fracción II, del Reglamento del Senado de la República, presento ante esta Honorable Asamblea la siguiente proposición con punto de acuerdopara que el gobierno, en sus diferentes niveles, emprenda más y mejores acciones tendientes a fortalecer la equidad de género, al tenor de la siguiente
Exposición de Motivos
De manera reciente el INEGI dio conocer los resultados del Censo de Población y Vivienda 2010 en México. Con base en las cifras que arrojó dicho estudio tenemos que en el país hay 112 millones 336 mil 538 habitantes, de los cuales 54 millones 855 mil 231 son hombres y 57 millones 481 mil 307 son mujeres. Es decir en México las mujeres representan más de la mitad de la población. Estos datos resultan aleccionadores, porque si bien el 8 de marzo de declaró como Día Internacional de la Mujer, y este año conmemoramos más de 100 años de este protocolo, y no hay que dejar de lado el balance de la situación de la mujer en el país.
Basta decir que a nivel mundial las mujeres representan entre el 20 y el 50% de la fuerza laboral, pero solamente entre el 3 y el 20% son propietarias de la tierra, situación que se dramatiza aún más en los países en vía de desarrollo. En la política sólo en 24 países del mundo las mujeres conforman 30% o más de sus Congresos.[1] En este tenor de ideas la Organización de las Naciones Unidas, a través de la Plataforma de Acción Beijing, confirma que las mujeres no constituyen si siquiera la mitad en las estructuras de toma de decisiones.
En México, si bien desde el Congreso se ha venido impulsando un trabajo serio en cuanto a la igualdad de género, falta mucho por hacer. Pues “a pesar de contar con dos instrumentos jurídicos tan valiosos como la Ley General para la Igualdad entre Hombres y Mujeres y la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, observamos con preocupación la falta de cumplimiento de dicha normatividad; como ejemplo podemos citar que el análisis realizado a las 32 entidades federativas del país, refleja la nula o escasa participación de la mujer en cuanto al acceso a los cargos públicos de primer nivel en las diferentes dependencias gubernamentales estatales, tal es el caso de los gobiernos de Baja California, Coahuila, Durango, Guanajuato, Quintana Roo, Sonora y Tabasco, donde no hay una sola mujer al frente de puestos de decisión. Y en otros estados como Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Guerrero, Jalisco, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Veracruz y Yucatán hay tan solo una mujer ostentando este tipo de responsabilidades”.[2]
A su vez, cómo dejar de mencionar que en el plano laboral las diferencias entre hombres y mujeres continúan en la retribución económica; de acuerdo con la firma REGUS, las mujeres mexicanas reciben sueldos 35% inferiores a los de los hombres.[3]
A lo antes referido sumemos que 70% de la población considera que la sociedad mexicana es machista y 53% cree que las mujeres son discriminadas.[4]equidad de género y de discriminación a la mujer, aún hay más por hacer que por andar festejando.
Es necesario cambiar el rumbo. La participación de la mujer en la toma de decisiones es necesaria para consolidar un autentico régimen democrático, entendido éste no sólo como un mecanismo jurídico procedimental y electoral para organizar elecciones y acceder al poder, sino como forma de vida que redunde en una mejora constante del ciudadano en todos los ámbitos de la vida.
El gobierno, en sus diferentes niveles está obligado ética y políticamente a promover la equidad de género en la sociedad a través de más y mejores programas encaminados a ello.
Derivado de lo anterior, someto a consideración de esta Honorable Asamblea el siguiente
PUNTO DE ACUERDO
ÚNICO.- Que este Senado de la República exhorte a los diferentes niveles de gobierno, federal, estatal y municipal, a que emprendan más y mejores acciones encaminadas a fortalecer y hacer realidad la equidad de género, a fin de darle mayor participación a la mujer en todos los ámbitos de la vida social, política, cultural y económica en el país. Dado en el salón Legislativo de Xicoténcatl, a los xx días del mes de marzo del 2011.
[1] “Mujer: nada que celebrar”, Editorial de EL UNIVERSAL, 8 de marzo de 2011.
[2] Ver el Punto de Acuerdo que presentaron las senadoras Minerva Hernández Ramos, Emma Lucía Larios Gaxiola y Beatriz Zavala Peniche, gaceta del Senado de la República, 8 de marzo de 2011; http://www.senado.gob.mx/sgsp/gaceta/61/2/2011-03-08-1/assets/documentos/gabinetes_estatales.pdf
[3] “Mujer: nada que celebrar”, Óp. Cit.
[4] “Encuesta revela que persiste machismo y discriminación”, EL UNIVERSAL, 8 de marzo de 2011.
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